I JORNADA JUVENIL - Segunda parte

        Continuando con la crónica de la I Jornada Juvenil del 15 de mayo, ni bien entramos se nos colocó nuestro solapero, se nos dio un cancionero y se nos mandó al ruedo para participar en las dinámicas, las mismas que buscaban romper el hielo y crear vínculos de amistad.  La verdad es que las chicas y los chicos en general se adaptaron a las mismas, aunque claro no faltaba un poco de timidez para realizarlas.  Yo mismo, debo confesar, no me sentía muy a gusto con ellas, pero se trataba de romper con la timidez y el hielo propio de personas que no se conocen.  Fue gracioso ver a las Carvajalinas y Carvajalinos en medio de la algarabía.

En el ruedo...  Aparecen Shirley, Isabel, Tom, Sol,..., y Natalia...

       Y añado un videito que muestra uno de los cantos usados con los respectivos movimientos de cuerpo.

         El ruedo fue el inicio de todo.  Se empezó cantando (como se aprecia en el video), pero en eso Edwin (integrante de Savia Joven) empezó con las dinámicas, y más dinámicas, y puras dinámicas ja, ja, ja...

Aparece Gladis... y del cole Shirley y Jhon.

        Las dinámicas tenían como objetivo que los participantes se conozcan y para eso se iba indicando que se junten de a dos para que compartieran algunos datos y experiencias personales.

Justo aquí se aprecia a Jhon compartiendo de "corazón" con Harumi, creo.

        Después de todo el compartir entre los participantes vino la dinámica principal porque era la recogía todo lo que se había conocido de cada uno de los nuevos amigos.  Y la dinámica se llamaba "La Pasarela", porque la misma consistía en formar dos columnas para que modelara uno por uno mientras los demás iban diciendo todo lo que sabían de él o ella.  Fue muy novedosa y super divertida.

Preparando la pasarela.  Y Edwin a la entrada de ella dando las respectivas indicaciones.

        Ahora veremos algunos momentos de la pasarela en las que aperecen las y los Carvajalinos.  A ver que tal se desenvolvieron.

Jhon en la pasarela

Isabel en la pasarela

       Luego de la dinámica de la pasarela se hizo otra con la finalidad de formar los grupos de trabajo y reflexión.  La idea era reflexionar sobre la realidad en base a ciertos valores y sus antivalores (Libertad - opresión, Sensibilidad - indiferencia, paz - violencia, etc).  Cada uno de los participantes tenía que expresar su vivencia personal sobre el valor o antivalor que le había tocado.  Presento las fotos del grupo que me tocó acompañar.

Aparecen Tom, Isabel, Natalia del "Melitón Carvajal".  También Carla y Harumi del Colegio "El Carmelo"

        Después del momento de reflexión pasamos al segundo piso para observar una serie de imágenes que nos hablaban de la realidad.  Era contrastar lo que habíamos compartido con las cosas que pasan en el mundo.  Fue una experiencia interesante y muy profunda.

Este es el biombo que se encontraba al final del "túnel".  En él se aprecian un lema, imágenes varias y unas "manos"

Chicos del Melitón observando el mural.

A cada uno se le entregó una mano a fin de que escriban en ella un compromiso personal

Escribiendo sus compromisos personales

        Ya para esto había llegado el Carvajalino que faltaba, Miguel Castro, quien vivía cerca del Centro de Espiritualidad.

Aquí todos los del Carvajal.  Atrás, de blanco, Miguel Castro, el que faltaba.

        Después de comer algo fuimos a un salón para compartir nuestros compromisos personales en relación a lo vivido.

Una de las integrantes de otro grupo compartiendo su trabajo.  Detrás, en la pizarra, se pegaban las siluetas con las manitos.

        Después del compartir organizamos la Eucaristía, en la que presentaríamos todo vivido a lo largo de la jornada.

Aquí, en el segundo piso del Centro de Espiritualidad.  Estamos en la Capilla recogiendo las vivencias del día y presentándoselas a Jesús.

        Durante la Eucaristía (Misa) los jóvenes participaron muy activamente.  El padre Teo fue muy concreto en su análisis del Evangelio.  Además uno de sus seminaristas dio un sencillo testimonio sobre su vocación.  Al término de la Eucaristía se bendijeron unas cruces que fueron impuestas a los participantes como signo de un compromiso con Cristo.
        Ya después de esto los alumnos y demás participantes se retiraron a sus hogares con la luz de la inquietud encendida en ellos (al menos así lo espero).