A lo largo de estos 2011 años de cristianismo (aproximadamente) muchas veces se nos ha presentado la figura de María como un personaje de "altar", llena de alhajas, vestidos finos, pelucas, flores e inciensos, alejada de sus devotos, y ciertamente María no era así.
Y no es que este mal todo eso, lo que pasa es que corremos el peligro de dejarla así, en el altar, alejada de nosotros, cuando de lo que se trata es de que la veamos cercana a nosotros, amiga y compañera en nuestro caminar.
El siguiente canto nos acerca a la verdadera persona de MARÍA DE NAZARET, mujer humilde y sencilla, servidora de su pueblo; la mujer que atrajo la mirada de Dios.
Que la hermosa letra de este canto nos mueva a desear conocer más a María en las cristalinas fuentes de los Evangelios.
a bueno profezor kiero ser sincero toha ezta lectura eztubo mui interenzante es una lectura kazi para reflexionar
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